La alopecia frontal fibrosante es un tipo de alopecia cicatricial, además de ser una afección muy común últimamente, no se conoce aún, de donde proviene. Por lo general, aparece en mujeres a partir de la menopausia, aunque en la actualidad, se están dando casos en mujeres pre-menopáusicas y en hombres.
La alopecia alopecia frontal fibrosante por lo general, daña al pelo del área de la diadema, es decir, el área fronto-temporal y al pelo de las cejas, aunque también puede verse perjudicado, el pelo del área de la nuca e incluso del vello corporal. Es común que aparezcan barritos en la cara y es también es común que se las venas de la frente, sobresalgan.
La alopecia frontal fibrosante avanza paulatinamente en el transcurso de unos años y después, hay casos, en los que en algunos pacientes, se detiene de forma espontánea.
Causas de la Alopecia frontal fibrosante
No se sabe aún la verdadera causa de la alopecia frontal fibrosante, sin embargo, dado que el inicio de la afección, en lo que respecta a las mujeres, se da después de la menopausia, se piensa que puede tener origen hormonal. De hecho no es común ver esta afección en mujeres jóvenes.
Al parecer la alopecia frontal fibrosante presenta un doble mecanismo autoinmune, es decir, que el sistema inmunitario agrede las células del propio organismo, convirtiéndose en agresor y hormonal y que suele presentarse en pacientes sensibles genéticamente.

Lo que quiere decir que el mecanismo autoinmune agrede al pelo, por lo que le produce una inflamación que si no se frena, el folículo piloso es eliminado. El mecanismo hormonal puede tener influencia en esta patología, debido a que algunos de los exámenes que se llevan a cabo, están relacionados a la frecuencia con la que se presenta esta enfermedad en mujeres con menopausia precoz o extirpación de útero.
Por otro lado, se presenta la posibilidad de que haya una susceptibilidad genética, debido a que por lo menos un 10% de los pacientes tiene algún pariente afectado con alopecia frontal fibrosante.
Sin embargo, aún demasiadas preguntas sobre las causas de esta patología y no se desecha la idea de que tenga alguna influencia un determinado factor ambiental.
Síntomas de la Alopecia frontal fibrosante
Como ya se ha mencionado, es una afección, de la cual, se desconoce la causa que la produce. Se tiene conocimientos de que hay factores auto-inmunitarios y hormonales en su origen, pero se desconoce la razón por la cual se manifiestan.
Se piensa que el descenso estrogénico que se produce en la etapa de la menopausia, podría cambiar la regulación del ciclo del cabello, originando los fenómenos inflamatorios que producen la enfermedad.
En lo que se refiere a la actividad inmunitaria, la mayor incidencia de otros cambios del mismo origen, tales como vitiligo, disfunción tiroidea, afirman esta hipótesis.

Es característica en mujeres post-menopáusicas y la forma de pérdida de cabellos es muy particular: se puede ver un retroceso en la línea de implantación frontal del cabello que, paulatinamente, va evolucionando hacia la parte de atrás. Sin embargo, también puede ocurrir afectación de la zona occipital.
Otra característica común es la pérdida de pelos en las cejas, en por lo menos, en un 75% de los casos, un síntoma que puede ser el primero en manifestarse. En alguno de los casos, puede ocasionar que se caigan también las pestañas, el vello facial, y/o corporal: estas tres manifestaciones suelen presentarse en formas de peor pronóstico.
Por lo general la alopecia frontal fibrosante no presenta síntomas, aunque se sabe, que por lo menos la tercera parte de los pacientes, pueden presentar prurito, a lo que se le conoce también como escozor o incluso dolor o ardor en el cuero cabelludo (tricodinia).
Diagnóstico de la Alopecia frontal fibrosante
El diagnóstico optimo de la alopecia frontal fibrosante se lleva a cabo, cuando se relacionan los datos clínicos obtenidos en el examen físico visual y por medio de la dermatoscopía, con el resultado histológico de una biopsia de la piel. Sin embargo, es frecuente, que el diagnóstico pueda hacerse sólo por medio de la exploración por un dermatólogo experimentado en dermatoscopía, evitando la necesidad de llevar a cabo una biopsia.
Una evaluación con detalles es imprescindible, debido a que es muy común que la alopecia frontal fibrosante aparezca al mismo tiempo que la alopecia androgenética.

También es común que este tipo de alopecia se relacione a alteraciones de la glándula tiroides, muy especialmente al hipotiroidismo. En los actuales momentos, es recomendable que en se recomienda que en el examen inicial del paciente se requiera un examen de sangre con perfil hormonal tiroideo.
Una biopsia de piel para hacer el diagnóstico de alopecia frontal fibrosante no es un requisito indispensable. El especialista con experiencia, puede relacionar los datos clínicos y dermatoscópicos para emitir el diagnóstico. Solo en casos en los que se presente alguna duda, se recomienda realizar la biopsia.
El desarrollo de la alopecia frontal fibrosante es, generalmente, de avance lento que dura un periodo de tiempo que no se puede determinar y por último, una remisión espontánea. El área que ha sido dañada, tendrá una alopecia irreversible, debido a que el tejido cicatricial no permite el crecimiento del cabello.
Los casos con peor pronóstico en lo que se refiere al nivel de alopecia, por lo general, se asocian con pérdida de las pestañas, del vello corporal y la existencia de pequeñas protuberancias o pápulas eritematosas faciales. También es probable, que de manifestarse estos signos de manera súbita, el especialista piense que sean necesario, hacer un tratamiento oral para impedir o enlentecer la progresión de la alopecia. (Ver artículo de Alopecia androgénica femenina)
Tratamiento para la Alopecia frontal fibrosante
En la actualidad no hay un tratamiento que cure la alopecia frontal fibrosante. No obstante, hay tratamientos médicos que en un gran número de casos, han sido eficaces para detener o por lo menos frenar el progreso de la alopecia.
Al ser una alopecia cicatricial, a medida que se cae el cabello, éste es sustituido por una cicatriz, por lo que el área del pelo caído queda imposibilitada para el crecimiento. La finalidad del tratamiento es detener el progreso de la alopecia, de tal manera, que el cabello se mantenga hasta que espontáneamente se frene.
En lo que se refiere a la farmacología que se emplea para el tratamiento, es común el empleo de medicinas antiandrógenas como la dutasterida y la finasterida, que sirven para ejercer acción en lo que al factor hormonal toca; son medicinas que son bien aceptados, no los financia la Seguridad Social, cuando es para esta enfermedad y además, deben ser aplicados por años.
A pesar de que no está en el prospecto la indicación de alopecia en estos medicamentos, hay una gran evidencia científica que certifica su uso.

Para la aplicación de estos medicamentos las mujeres que se encuentran en edad de posibilidad de quedar embarazadas, deben evitarlo, mientras estén en tratamiento. Por otro lado, también se aplican terapias antiinflamatorias locales, como las microinyecciones de triamcinolona, ya que junto con los medicamentos han demostrado ser efectivas para detener el progreso de la enfermedad.
También se puede decidir por otros productos comunes, como los antiinflamatorios o el minoxidil, cuya aplicación debe ser indicada por el especialista. Sin embargo, hay pacientes en los que puede ser necesario emplear otro tipo de fármacos como la isotretinoína, hidroxicloroquina o la pioglitazona.
Como se ha dicho anteriormente, la finalidad de los tratamientos médicos es neutralizar la alopecia, pues hasta ahora, no se ha logrado conseguir que mejore. Cuando ya se ha caído el pelo en un área determinada, se tendrá que recurrir a medidas cosméticas, como la micropigmentación o tatuaje en cejas o los postizos capilares en el cuero cabelludo.
En la actualidad, existe una alternativa cosmética con un efecto excelente: se trata de los sistemas capilares fijos FAS, que son sistemas de pelo natural que son adheridos de manera fija a la piel del cuero cabelludo, lo que posibilita a la paciente tomar una ducha, bañarse en la playa, etc. sin necesidad de retirar el sistema.

El trasplante capilar no es siempre la mejor alternativa para reparar el daño causado por la alopecia frontal fibrosante en muchos pacientes, sin embargo, para pacientes a quienes se les ha estabilizado la enfermedad, les puede ser de utilidad, siempre y cuando no tengan inflamación y si se trata de áreas pequeñas.
Las pacientes deben estar al tanto, que el pelo utilizado en el trasplante, es probable que se caiga quizás en lapso de 5 años. El especialista le recomendará en qué casos valdría la pena plantearse esta alternativa.
Alopecia frontal fibrosante en mujeres jóvenes
La alopecia frontal fibrosante, como ya se ha mencionado, consiste en una alopecia cicatricial, de la cual no se conoce lo que la produce. Se cree que posee un origen autoinmune, lo que significa que las células del sistema inmunitario del paciente agreden por error al pelo y un origen hormonal.
Sin embargo, este mecanismo preciso está siendo investigado y aún no se sabe con certeza la causa. La genética, al parecer, también está involucrada de alguna forma, puesto que un 5% de los pacientes tiene algún familiar con esta misma alopecia.
Los datos clínicos que presenta son: pérdida de cabello en el área de la diadema, es decir, el área frontal además de las patillas y la caída de las cejas. En algunos casos, hay pacientes que también pierden el vello corporal.
Por lo general, el mayor número de los pacientes, con esta afección, son mujeres postmenopáusicas, aunque también se dan casos en mujeres más jóvenes y hombres.
Los pacientes con alopecia frontal fibrosante pueden tener además barritos en la cara conocidos también como pápulas faciales, depresión de las venas de la frente y manchas faciales.
Para diagnosticar la alopecia frontal fibrosante, puede hacerse en una clínica y la exploración con un tricoscopio. Por ser ésta, una alopecia, que afecta cada vez a más personas, los especialistas están más relacionados con el diagnóstico. Solo en casos en los que haya dudas, puede ser muy útil una biopsia de piel. (Ver artículo de Liquen plano pilar)

Alopecia frontal fibrosante Postmenopáusica
La alopecia frontal fibrosante posmenopáusica es una variación clínica diferencial del liquen plano pilaris que le pasa a mujeres de más de 60 años. Kossard para el año 1994, hizo una descripción de estos cambios, como un retroceso progresivo de la línea de implantación del pelo en el área frontal, el cual, por lo general, perjudica las cejas con alopecia cicatricial. No existe un tratamiento efectivo, pero usualmente, se normaliza con el tiempo.
A continuación la presentación de un caso clínico
La paciente es una mujer de 65 años de edad que presenta una caso precedente de síndrome ansioso-depresivo, para lo cual se estaba aplicando un tratamiento con bromazepam. La paciente asistió a consulta por presentar un cuadro de pérdida continua de pelo en el cuero cabelludo y en las cejas, por más de dos años en desarrollo sin otra sintomatología adicional.
Al examen físico respondió con presencia de una alopecia frontal y temporal con retroceso de la línea de implantación de pelo, eritema folicular e hiperqueratosis en la zona de transición, así como una desaparición completa de las cejas. La zona de alopecia cicatricial no presentaba orificios foliculares, observándose una piel delgada, descolorida y reluciente que discordaba con la coloración hiperpigmentada del resto de la piel de la cara.
No se detectaron lesiones relacionadas en las uñas, en las mucosas ni en el resto del tegumento cutáneo.

En la analítica general que se le hizo a la paciente, se observaron cambios significativos, con la excepción de un colesterol elevado al límite de la normalidad. El estudio inmunológico y las determinaciones hormonales, es decir las hormonas sexuales suprarrenales y ováricas, función tiroidea y función hipofisiaria, fueron rigurosamente normales.
Alopecia frontal fibrosante en hombres
Se llevó a cabo un estudio descriptivo de hombres, desde enero del 2010 hasta diciembre del 2015. Se recopilaron los datos demográficos, las características clínicas y los tratamientos realizados.
Los resultados obtenidos fueron los siguientes:
Se incorporaron en el estudio a 12 pacientes cuya edad promedio era de 75 años. La alopecia fue el tema a consultar sólo en 4 pacientes. La recesión media de la línea de implantación del pelo fue de 3cm.
El 50% de los hombres tenía granos en el rostro, el 83% alopecia de cejas, extremidades y alopecia androgenética (AGA). El eritema y la hiperqueratosis folicular se podía observar en el 66% de los casos y solo el 25% decía tener prurito. El tratamiento más empleado generalmente, se basó en corticoide tópico en 8 pacientes lo que representa un 66% y relacionado a minoxidil tópico en 4 de ellos, es decir en un 33%.
Como conclusión se obtuvo por medio de los datos obtenidos en nuestra serie, los granos en el rostro, la alopecia androgenética y la afectación del vello corporal son más comunes en los hombres con Alopecia frontal fibrosante que en las mujeres.
Alopecia frontal fibrosante Histología
La alopecia frontal fibrosante es un ente clínico que tiene como característica principal la recesión de la línea de implantación frontotemporal, que aparece en mujeres de edad media y avanzada.
Desde que Kossard la describió en 1994, han habido más de un centenar de casos de pacientes con este cuadro, publicados, en los que se ha descrito otros tipo de alopecia, como la que se produce en cejas y axilas, inflamación perifolicular, etc. que contribuyen al diagnóstico clínico de esta enfermedad y a su diagnóstico diferencial con otras alopecias cicatriciales.
Histopatológicamente muestra un infiltrado inflamatorio y fibrosis lamelar perifolicular. Desde el punto de vista terapéutico, se han puesto a prueba muchas alternativas como corticosteroides, finasterida, minoxidil, etc., sin que alguna de las mencionadas han demostrado algún provecho en lo que se refiere a frenar el avance de la alopecia.

Alopecia cicatricial frontal fibrosante
Cuando se presenta la situación de un trastorno de alopecia no es fácil, ya que agrede a una parte relevante de la apariencia física como es el cabello.
La definición más clara que encontramos cuando se menciona el término alopecia, es la caída del cabello, que por lo general lo padecen, hombres, aunque se ha descubierto, que también una gran cantidad de mujeres, además en cualquiera de los tipos de alopecia conocidos.
Por lo general, la alopecia afecta a los hombres a medida que envejecen, pero también a muchas mujeres y en sus diferentes formas. La alopecia cicatricial, es uno de esos tipos de alopecia, que consiste en la destrucción de los folículos pilosos y se sustituyen por un tejido de cicatriz. Su aparición es el resultado de heridas, quemaduras, infecciones bacterianas, tumores o radioterapa, entre otras causas.
La alopecia cicatricial, es uno de esos tipos de alopecia, que consiste en la destrucción de los folículos pilosos y se sustituyen por un tejido de cicatriz. Su aparición es el resultado de heridas, quemaduras, infecciones bacterianas, tumores o radioterapa, entre otras causas.

Es probable que, en algunos casos, la persona que esté sufriendo de alopecia frontal fibrosante, presente síntomas de escozor, ardor y dolor en el área de la alopecia y la caída del cabello se presente de forma progresiva. Otros tipos de alopecia tienen pérdida de cabello en forma lenta, en la cicatricial como generalmente, no hay síntomas, pasa desapercibida durante un tiempo.
Otra característica de la alopecia cicatricial es que no es reversible, por lo que se tiene que asimilar que en esa parte de la cabeza, donde aparece una cicatriz o marca, no hay posibilidad de que el cabello crezca de nuevo.
Muchas de las personas que pasan por esta situación se desaniman cuando ven la cicatriz en su cabeza, sin embargo, en la actualidad, hay diferentes métodos con los que se puede recuperar la apariencia perdida, uno de ellos es: la integración capilar sin cirugía.
La integración capilar sin cirugía consiste en un procedimiento que se aplica de manera personalizada, comenzando por el propio pelo biológico del paciente, el cual se une al mismo pelo natural de excelente calidad. Se obtiene una apariencia tan natural que posibilita llevar a cabo la higiene diaria hasta practicar cualquier tipo de deporte, peinarse a gusto, etc.
No se debe dejar que una alopecia cicatricial cambie la apariencia física, teniendo a la mano, la solución para lograr la apariencia perdida. Gracias a las soluciones de calidad y duraderas como las que ofrecen los sistemas de integración capilar, unido a las más de dos décadas de experiencia aplicada a los numerosos casos de alopecia, son una garantía para los pacientes de alopecia.
Remedios caseros para la alopecia frontal fibrosante
Debido a que los resultados obtenidos con tratamientos farmacéuticos no ofrecen los resultados, que esperan quienes padecen de cualquier tipo de alopecia, recurren a la alternativa que ofrecen los tratamientos con remedios naturales para detener la alopecia, como los que a continuación se mencionan.
Aloe vera
Tratamientos con aloe vera para el cabello es muy bueno para tratar la caspa y la caída del cabello, también es útil para la hidratación del cuero cabelludo y el equilibrio de los niveles de pH del cabello.

Modo de empleo: aplicar el gel del aloe vera sobre el cuero cabelludo y masajear el cuero cabelludo suavemente esparciendo bien el gel, dejándolo actuar por 10 minutos. Se aconseja repetir este procedimiento dos veces por semana pues sirve para evitar la caída del pelo.
El Aloe vera ayuda a detener la caída del cabello y es el principio activo empleado en muchos tratamientos capilares. Además, contribuye a que no surjan otras enfermedades del cuero cabelludo tales como la caspa o la descamación, además de dar brillo al cabello.
Zumo de cebolla
La cebolla es uno de los remedios caseros que ha sido utilizado para el crecimiento del cabello, desde hace mucho tiempo. Por su alto contenido de azufre, la cebolla estimula la elaboración de proteínas de colágeno y contribuye en el crecimiento capilar.
Modo de empleo: hacer un zumo de cebolla, colocando dos cebollas en una licuadora y licuar hasta que se forme el zumo. Luego, aplicarlo en el cuero cabelludo, tratando de mojar por completo todo el cabello, y dejándolo actuar por lo menos unos 15 minutos.
Luego se enjuaga el cabello con mucha agua y se lava con un champú neutro. Se aplica este remedio natural para el cabello por lo menos 2 veces por semana.

Vinagre de manzana
Es recomendable el uso del vinagre de manzana para lavar el cabello, debido a que contribuye a que se mantenga limpio y sano, además de la prevención que brinda ante infecciones o caspa.
El vinagre de manzana es un tratamiento natural recomendado, debido a que por sus propiedades, sirve para recuperar la salud del pelo, ya que contribuye a:
- Brinda brillo y suavidad al cabello.
- Estimula la circulación sanguínea en los folículos pilosos.
- Contribuye con el equilibrio de los niveles de pH del cabello.
- Sirve para evitar afecciones bacterianas del cuero cabelludo.
- Contribuye a desechar las células muertas y actúa como astringente destruyendo los residuos tóxicos de la polución, etc.
Modo de empleo: se mezcla media taza de vinagre de manzana con media taza de agua y se aplica sobre el pelo húmedo. Se deja actuar entre 5 y 15 minutos y luego se enjuaga con agua abundante. Repetir el tratamiento por lo menos una vez por semana.

Huevo
Debido a su elevado contenido de proteínas, se convierte en el tratamiento idóneo para la recuperación la salud del cabello. Pues además posee otros nutrientes esenciales tales como: hierro, selenio, fósforo, zinc y azufre que contribuyen a controlar la caída del cabello y a fortalecerlo.
Modo de empleo: Se mezcla un huevo con una cucharadita de aceite de oliva y una de miel para formar una mascarilla para el cabello. Se debe mezclar todos los ingredientes hasta que se obtenga una solución homogénea y densa. Luego se procede a aplicar la mezcla en el cabello húmedo y se esparce por todo el cabello, cuidando que el quede bien impregnado de la mezcla el cuero cabelludo.
Se recomienda dejar que la mezcla actúe 20 minutos. Según loa severidad del caso de la caída del cabello, este tratamiento se puede aplicar hasta 3 veces por semana.

Té verde
Otro de los remedios caseros recomendados para el tratamiento de la alopecia es el té verde, debido a sus propiedades antioxidantes que resultan beneficiosas para el organismo en general.
Aunque aún no se ha podido comprobar científicamente la capacidad del té verde para detener la caída del cabello, hay diversas investigaciones que relacionan sus acciones beneficiosas en la mejoría de los trastornos que ocasionan los diferentes tipos de alopecia.
Modo de empleo: además de preparar una infusión bien concentrada para lavar el cabello y dejarlo actuar por lo menos 40 minutos antes de enjuagarlo con abundante agua, también se recomienda beber entre 3-4 tazas de té verde al día.
Otro de los beneficios del té verde es que contribuye al fortalecimiento de los folículos pilosos, que es lo que impide la caída del cabello.
MUY ENTRETENIDO E INTERESANTE